Las crónicas antiguas mencionan algunos episodios sobre raptoS de niños por parte de grandes aves, lo cual es totalmente desestimado por los ornitólogos en general, aludiendo al peso, estructura física y la utilización de la gravedad que debe utilizar el ave para desplazarse en el aire, más aún, si lleva una carga de varios kilos en sus patas.
Sin embargo existen algunos episodios que han quedado registrados a través del tiempo, y han engrosado la idea que es posible la captura de un niño pequeño por parte de un águila, por ejemplo, de dimensiones grandes y con la fuerza necesaria para realizar esta acción.
Dicen las crónicas que una niña fue arrebatada por un águila en 1838, en las montañas de Suiza. La niña de cinco años llamada Marie Delex fue capturada por un ave cuando se encontraba jugando con sus amigas. No fue transportada al nido del ave, ya que un grupo que salió en su búsqueda encontró allí dos aguiluchos y montones de huesos de cabra y de oveja, pero ningún rastro de la pequeña. Pasaron dos meses antes de que un pastor encontrara sobre una roca su cadáver mutilado.
Por otra parte, la noruega Svanhild Hantvigsen narra que cuando tenía tres años, en 1932, fue capturada por un águila y llevada hasta su nido. Fue rescatada por varias personas que habían presenciado el hecho, y tuvo la suerte de escapar del trance sin un rasguño, aunque sus ropas estaban hechas jirones
El caso más famoso quizás sea el del niño Marlon Lowe, que a la edad de diez años mientras estaba en el patio de su casa fue atacado por un ave enorme y encumbrado unos metros del suelo. Los gritos de su madre ahuyentaron el ave. Este hecho ocurrió en Lawndale (Illinois) el 25 de julio de 1977 y según se pudo averiguar en aquellas fechas y en lugares cercanos a la traumática experiencia del niño Marlon Lowe, hubo varios sucesos parecidos de aves gigantescas que trataron de llevarse algunos cerdos de granjas vecinas.
Hace un par de años atrás una importante cadena de televisión americana localizó a Marlon Lowe para confirmar su experiencia pues existían rumores que había sido un montaje de vecinos de la zona asustados por las noticias que hablaban de este tema. Marlon Lowe ya mayor confirmó totalmente su experiencia y no se retracto de nada de lo vivido por él y su madre en aquellos años.
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