viernes, 19 de diciembre de 2014

LOS CUERVOS PIENSAN, Y SE UNEN AL CLUB DE HUMANOS Y PRIMATES

TIENEN EL PODER CEREBRAL PARA RESOLVER TAREAS DE RELACIÓN DE COINCIDENCIA DE ORDEN SUPERIOR
Madrid (Europa Press).- Los cuervos siempre han sido reconocidos por su gran inteligencia: pueden recordar caras, usar herramientas y comunicarse en formas sofisticadas. Pero un nuevo estudio encuentra que los cuervos también tienen el poder cerebral para resolver tareas de relación de coincidencia de orden superior, y pueden hacerlo de forma espontánea. Eso significa que los cuervos se unen a los seres humanos, los simios y los monos en la exhibición de pensamiento relacional avanzado, de acuerdo con esta investigación.

"Lo que los cuervos han hecho es una hazaña fenomenal", dice Ed Wasserman, profesor de Psicología en la Universidad de Iowa y autor del estudio. "Esa es la maravilla de los resultados. Se ha hecho antes con los simios y los monos, pero ahora estamos tratando con un pájaro; pero no cualquier pájaro, un pájaro con un cerebro tan especial para las aves como el cerebro de un mono es especial para los mamíferos".

El estudio, publicado en Current Biology, fue realizado por Wasserman, junto a Anna Smirnova, Zoya Zorina y Tanya Obozova, investigadoras del Departamento de Biología de la Universidad Estatal Lomonosov de Moscú en Moscú, Rusia, donde el estudio se llevó a cabo.
Experimento ingenioso

Wasserman dijo que los investigadores rusos han estudiado las especies de aves durante décadas y que un tema principal de su trabajo es la cognición. Él le da crédito a sus homólogos con un estudio reflexivo y bien planificado. "Este fue un experimento muy ingenioso", dice Wasserman. En el estudio participaron dos cuervos encapuchados con al menos 2 años de edad.

En primer lugar, las aves fueron entrenadas y evaluadas para identificar artículos por el color, la forma y el número de muestras individuales. Aquí entra cómo funcionaba: las aves se colocaron en una jaula de malla de alambre en la que se insertaba en ocasiones una bandeja de plástico que contiene tres tazas pequeñas. La taza de muestra en el medio se cubrió con una pequeña tarjeta con un color, forma o número de elementos. Las otros dos tazas también se cubrieron con tarjetas, de las que una se correspondía con la muestra y otra que no.

Durante este periodo de formación inicial, la taza con la tarjeta de muestra contenía dos gusanos de la harina; los cuervos fueron recompensados con estos alimentos cuando eligieron la tarjeta, pero no recibieron alimentos cuando eligieron la otra tarjeta.

Una vez que los cuervos se entrenaron en emparejar las muestras, los investigadores pasaron a la segunda fase del experimento. Esta vez, las aves fueron evaluadas con pares coincidentes relacionales de artículos. En estos ensayos, las características determinadas relacionales estaban dispuestas de tal manera que los pares de prueba no se ajustan con precisión el par de la muestra, eliminando así el control por la identidad física. Por ejemplo, los cuervos podrían tener que elegir dos círculos del mismo tamaño, en lugar de dos círculos de diferentes tamaños cuando la tarjeta de muestra presentaba dos cuadrados del mismo tamaño.

Lo que sorprendió a los investigadores no era sólo que los cuervos podían realizar correctamente los juegos relacionales, sino que lo hicieron espontáneamente, sin entrenamiento explícito. "Ese es el quid del descubrimiento", dice Wasserman.

"Honestamente, si era sólo por la fuerza bruta que los cuervos mostraron este aprendizaje, entonces hubiera sido un resultado impresionante. Pero esta hazaña fue espontánea." Aún así los investigadores reconocen que el comportamiento coincidente relacional de los cuervos no se produjo sin un conocimiento básico.


Leer más: 


jueves, 11 de diciembre de 2014

ASÍ ES LA CULEBRA QUE APARECIÓ EN ANGOL

LEVANTA LA CABEZA E HINCHA EL CUELLO PARA ASUSTAR

Las Ultimas Noticias   (12.12.2014)

sábado, 6 de diciembre de 2014

sábado, 29 de noviembre de 2014

lunes, 24 de noviembre de 2014

UNA NUEVA EXPLICACIÓN AL MITO DEL MONSTRUO DEL LAGO NESS

«NESSIE» NO EXISTE, DICE UNA ORGANIZACIÓN BRITÁNICA. HE AQUI LOS MOTIVOS
¿Existe el monstruo del lago Ness? No son pocos los testimonios y material gráfico que, durante años, han atestiguado la existencia de una extraña criatura en aguas de Escocia. Documentales, libros, películas... Más de mil testigos oculares aseguran haber visto al monstruo escocés: «Vimos un cuello enorme saliendo del agua». Personas, todas ellas, que aseguran no solo haber divisado una sombra en el horizonte, sino haber comprobado cómo se movía o incluso cómo era la tonalidad de su piel.
El del lago Ness es, sin duda, uno de los mayores mitos del mundo y que, por supuesto, la ciencia lleva años tratando de desmontar. Ahora «The Woodland Trust», una organización forestal británica, sostiene que los avistamiento son productos a la confusión producida por ramas y árboles que han caído al agua. Así lo relata la BBC en un artículo [que puedes leer aquí], en el que apunta que no hay mayor explicación a la existencia de «Nessie» que la de el movimiento de las ramas.
El experto Gary Campbell, quien lleva un riguroso registro de los avistamientos, aseguró el pasado mes de febrero que, por primera vez en noventa años, «no se había confirmado avistamiento alguno» de la monstruosa criatura. El argumento de «The Woodland Trust» sería, no obstante, un mazazo para los entusiastas de «Nessie», seguros de que la criatura sigue bajo las aguas. «Son muchas las ramas hundidas en el lago», asegura un portavoz de la asociación sin ánimo de lucro.
APPLE REAVIVÓ LA LEYENDA
Sea como fuere, la de esta organización no es más que una explicación más que añadir a la lista y que no conseguirá tumbar el mito. Precisamente este mismo año el servicio mapas de Apple desató la polémica después de haber captado unas imágenes aéreas del Lago Ness. La aplicación más utilizada por los usuarios de iOS mostró varias fotos en las que Andrew Dixon –uno de los observadores que ha sacado a la luz las capturas– afirmó ver en ellas al famoso monstruo. Peter Thain, otro de los observadores que descubrió las imágenes, afirmó entonces que en la foto puede verse al fantástico «Nessie», puesto que la forma que se observa bajo el agua parece tener un par de aletas con las que el «monstruo» se desplazaría. Sin embargo, testimonios más científicos indicaron después que podría tratarse de un tronco, una onda acuática, una estela de algún barco o un efecto óptico.
ABC / MADRID